El gigante sueco de la electricidad, Vattenfall, quiere construir en los Países Bajos la primera central eléctrica de hidrógeno en alta mar. La empresa pretende ganar la licitación del lote 7 del parque eólico Hollandse Kust West. Si tiene éxito, Vattenfall producirá hidrógeno directamente a partir de las turbinas eólicas con contenedores llenos de electrolizadores, transformadores y baterías.
Vattenfall defiende un proyecto de energía limpia
En primer lugar, Vattenfall afirma que hay muy pocos proyectos de producción de hidrógeno en alta mar. Según Catrin Jung, directora de energía eólica marina de Vatenfall, se trata de una evolución lógica. La producción de hidrógeno en alta mar proporciona hidrógeno renovable a precios competitivos.
Afirma:
« La producción de hidrógeno en origen tiene claras ventajas, no sólo en términos económicos, sino también por su carácter práctico. «
Además, el hidrógeno producido por Vattenfall aliviará las redes eléctricas terrestres sobrecargadas. También es una forma de diversificar la combinación energética reduciendo el suministro de combustibles fósiles. Por tanto, el hidrógeno parece ser un elemento importante en la transición energética.
La importancia de las turbinas de hidrógeno
En segundo lugar, Vattenfall quiere utilizar su experiencia en Escocia para su modelo de producción de hidrógeno en alta mar. A principios de este año, la empresa estaba desarrollando la primera turbina de hidrógeno del mundo frente a Aberdeen. De hecho, Vattenfall utilizará el parque eólico Hollandse Kust West para dar el siguiente paso y conectar varias turbinas de hidrógeno.
El Sr. Jung lo explica:
« La experiencia que estamos adquiriendo en Escocia puede aplicarse a mayor escala en Hollandse Kust West. «
Vattenfall instalará contenedores en las tres turbinas del polo de hidrógeno. Cuando funcionan en tándem, estos contenedores convierten la electricidad generada por las turbinas eólicas en hidrógeno. Vattenfall espera una capacidad de producción para el grupo de 45 MW. Con el tiempo, las turbinas de hidrógeno serán autosuficientes y no habrá necesidad de conectarse a la red eléctrica.
Invertir en una energía preparada para el futuro
Por último, Vattenfall cree que el hidrógeno desempeñará un papel fundamental en el futuro. Es un gas que tiene la capacidad de convertirse en electricidad sin emisiones de CO2 mediante la separación del oxígeno y el hidrógeno por electrólisis.
Además, el hidrógeno tiene la ventaja de ser almacenable, a diferencia de la energía solar y eólica. Se utilizan directamente después de la producción. El almacenamiento de estas energías renovables sería muy caro. En cambio, pueden convertirse en hidrógeno, que se transporta y se pone en contacto con el oxígeno para generar energía cuando se necesita.
En conclusión, Vattenfall cree que el uso del hidrógeno como energía excedente garantiza un suministro suficiente en caso de escasez.