Valtom, la autoridad pública encargada de la recuperación y el tratamiento de los residuos domésticos en el Puy-de-Dôme y el norte del Alto Loira, ha anunciado una nueva asociación con Waga Energy. Juntos producirán biometano a partir del centro de almacenamiento de residuos de Puy-Long, en Clermont-Ferrand. Esta colaboración es el primer proyecto europeo de producción de biometano a partir de una fuente de biogás “híbrida”.
Una unidad híbrida
La unidad WAGABOX® se instalará en el emplazamiento de Puy-Long y tratará el gas emitido por los residuos vertidos, así como el biogás procedente de la planta de metanización vecina, explotada por la empresa Vernéa. Esta mezcla se utilizará para producir biogás destinado a un proyecto de inyección de biometano. La producción de biometano garantiza un rendimiento energético muy superior al de la electricidad producida por la combustión del biogás. Además, la energía renovable se almacena y transporta fácilmente gracias a las infraestructuras de gas existentes, lo que permite sustituir los combustibles fósiles para usos con altas emisiones de carbono, como la industria y el transporte.
Un proyecto innovador
La unidad WAGABOX® inyectará en la red GRDF hasta 15 GWh de biometano al año, lo que equivale al consumo de más de 2.000 hogares. La sustitución del gas natural evitará la emisión a la atmósfera de 2.500 toneladas equivalentes de CO2 al año. La unidad abastecerá a la primera estación de servicio de combustible alternativo de Clermont-Ferrand, que entrará en servicio en 2021 en Gandaillat.
Fomentar las perspectivas
Laurent Battut, Presidente de Valtom, declaró que este proyecto innovador, único en Francia, es el resultado de cuatro años de concertación con el Estado. Para Mathieu Lefebvre, director general de Waga Energy, este proyecto de doble valorización ilustra las sinergias posibles entre una planta de metanización y un centro de almacenamiento de residuos, siempre que este último esté equipado con una unidad WAGABOX® y conectado a la red de gas. Este modelo contribuye a optimizar la valorización de los residuos y está llamado a generalizarse en Francia y a escala internacional, al servicio de la producción de biometano y de la transición energética.