Global Bioenergies ha empezado a producir isobuteno en su planta piloto de Champagne. Esta molécula no se encuentra en la naturaleza y se produce a partir de azúcares procedentes de residuos de remolacha, virutas de madera o cereales degradados. Este proceso reduce las emisiones de CO2 en dos tercios.
El proceso de producción del isobuteno
El director general de Global Bioenergies, Marc Delcourt, explica que el isobuteno se produce alimentando con azúcares a bacterias reprogramadas para producir la molécula. “Se pueden hacer muchas cosas con el isobuteno”, añade. Cuando las moléculas se unen por pares, dan isooctano, que se utiliza en los vehículos de carretera. Cuando se unen de tres en tres, dan isododecano, que es la base de la formulación de la parafina de aviación.
La ambición de Global Bioenergies
Fundada en 2008, Global Bioenergies tenía como objetivo inicial producir combustibles sostenibles para carreteras. Sin embargo, la caída de los precios del petróleo hizo que se abandonara esta ambición. En la actualidad, la empresa se centra en la producción de combustibles de aviación sostenibles (SAF), pero la inversión necesaria de 150 millones de euros está actualmente fuera de su alcance. Para alcanzar el tamaño crítico, la start-up se centra en la producción de isobuteno para la industria cosmética. El gigante de la industria L’Oréal posee ahora el 13,5% de la empresa.
Producción de cosméticos
Global Bioenergies produce isobuteno, lo purifica eliminando el CO2 y lo envasa en forma gaseosa. Este gas se transforma en isododecano, que se vende a la industria cosmética. La start-up también ha creado su propia marca de pintalabios y máscara de pestañas, Last. Su planta de Pomacle tiene una capacidad de producción de 15 a 20 toneladas anuales y constituye un buen comienzo para el mercado comercial. El próximo objetivo es abrir una nueva planta en 2025 para producir 2.000 toneladas al año y financiar un centro dedicado al combustible de aviación sostenible para 2028.
El sector de la aviación está sometido a presiones para reducir su huella de carbono y los combustibles de aviación sostenibles se consideran la principal palanca de descarbonización para las próximas décadas. Por tanto, Global Bioenergies tiene un importante papel que desempeñar en esta transición hacia una industria aeronáutica más sostenible mediante la producción de isobuteno a partir de fuentes renovables.